Innumerables fueron las hojas, la tinta, las teclas, los minutos y segundos de mi vida que les dedique.
Incontables la cantidad de horas de mi vida que se hicieron hermosas con su música.
Ni hablar de la cantidad de veces que sentí que Julian Casablancas escribía la historia de mi vida.
Y no me canso eh, no me canso de describir lo que siento por ellos. Porque todavía no encuentro la definición exacta. Cada paso que doy en este largo camino me marca una nueva manera de adorarlos, de admirarlos.
Y que sentí ese 4 de Noviembre del año 2011? PUF, QUE NO SENTI?
Ir en el colectivo, camino a la fila, sentir una emoción tan grande, una euforia tan gigante, unas ganas de tirarme por la ventana del colectivo y correr, gritando, saltando, desaforada.
Me sentí anestesiada de todo tipo de mal. Me pedí el día en el trabajo, porque ese IBA A SER EL DIA MAS FELIZ DE MI VIDA.
El día que esperé por años, el día que siempre pesé que iba a ser imposible, que nunca llegaría, el día que nunca me imaginé que iba a vivir y que ahora puedo contarle a sobrinos, hijos, y a mis futuros nietos.
Fue ese día. El día.
El día en el que me encontré cara a cara con los instrumentos que tantas veces dibujé. El día en el que sentí que me moria cuando los tenia a metros mio, y sentí como las lágrimas me recorrían.
El dia en el que vi frente a mis ojos, caminando con toda su paz, a Albert, Nikolai, Fab, Julian, y a mi eterno amor platonico, Nick Valensi,
El día en el que pude gritarle a Julian, (como tantos otros cientos) que lo amaba. Que lo amo. Que siempre lo voy a amar. Y que para mi definitivamente es mi Dios, mi salvador. El que me conoce tanto, sin conocerme. El dia en que pude ver su pelo grasoso, su campera de cuero, su caminar pausado y tambaleante de siempre. El día en el que se equivoco la letra de casi todas las canciones, como siempre, y me hizo reír.
El mejor día de mi vida.
Verlo a Nick agarrar con vigor esa guitarra, que tantas satisfacciones me ha dado y que con tanto amor le diseñaron. Verlo a Albert colgarse su hermosa Fender blanca a la altura prácticamente de los hombros, como siempre. Verlo a Nikolai con una sonrisa pícara, y a Fab con sus perfectos rulos soplados por el viento al compás de sus piecitos.
Ver eso, ya garantizaba que ese iba a ser el dia mas feliz de mi vida. Y lo fue.
Empezaron a matarme de amor con New York City Cops.
Y ese día me derretí cuando tocaron Automatic Stop, porque en su momento fue la descripción exacta de un estado de animo que me duro meses y que pude cerrar (a los golpes)
Y ese día sentí toda la euforia del mundo cuando empezó Last Nite, y no me daban las piernas para saltar, patalear, y al mismo tiempo gritar con todas mis fuerzas.
Y ese día sentí que moría cuando empezó el himno de mi vida, You Only Live Once, canción que me hizo adorarlos definitivamente, canción que me hace explotar de alegría ( y que le pifió a la letra también!)
Y ese día, sonaba What Ever Happened? y me recordaba a mi, tirada en el piso, escuchando noche tras noche la discografia completa antes de irme a dormir (si, los 3 discos , en su momento)
Y Heart in a Cage, y Under Cover of Darkness, y Macchu Picchu (me falto Taken For a Fool).
Y por si eso me pareciera poco (imposible) ese día terminaba con un show de fuegos artificiales, y de fondo? "That´s life". Recuerdo haberme quedado parada, atontada, enamorada, extasiada, y con los ojos llenos de lagrimas, mirando al cielo, y diciéndome a mi misma "Si, esto es vida. Esto es mi vida".
Y hubiese matado por ir corriendo al escenario, abrazarlo a Julian y decirle "LOCO, GRACIAS. GRACIAS POR HACERME QUIEN SOY."
Porque por ellos, descubri mi amor por el arte.
Por ellos descubrí mi amor por el diseño!
Por ellos redescubri que mi única pasión en esta vida es la música.
Por ellos conocí gente maravillosa, hermosa.
Por ellos estoy donde estoy ahora, y tengo los sueños que tengo.
Y por tus letras, Julian, estoy curada de tantos males, y tan enamorada de la vida.
Así, en una suerte de resumen, es como me sentí aquel dia 4 de Noviembre. Feliz.
Y si, lo fue.
El día más feliz de mi vida.
Del cual van a hablar generaciones y generaciones de mí.